El humo remplaza al oxigeno,
El alcohol es nuestro H2O...
El éter invisible de la fiesta ,
La proyección de las sombras
La proyección de las sombras
en esta habitación oscura,
con botellas en el piso
y ceniceros llenos.
y ceniceros llenos.
El ruido de las conversaciones,
El intercambio de egos,
Los choques de vanidad,
El coqueteo y el libido...
El coqueteo y el libido...
Todo circulando en el mercado
de las apariencias,
de las apariencias,
Siguiendo las leyes de oferta y demanda social.
Estamos suspendidos en un presente infinito,
Un ahora, que será toda la noche...
Que no será mañana ¿mañana?
¿Qué es eso?
Ni pudo ser ayer,
Porque ayer ya fue
Y hoy será.
La música son oraciones a los dioses,
El baile ecléctico de las ninfas
es un rezo perpetuo a Dionisio,
a la morbosidad del hedonismo.
No habrá donde morir mañana
Si morimos aquí hoy.
Este sitio esta lleno de vidas encontradas,
Con sus historias,
Amores y desamores,
Con sus vicios y patologías...
Todas las psicosis y sus locos
reunidos en este lugar,
reunidos en este lugar,
Abandonados a la soledad
de estar acompañados,
Obligados a pasar la pena existencial
con el vacío y la nausea de la época,
Confundiendo felicidad
con diversión,
con diversión,
Obedeciendo al monarca del lugar,
¿Placer le llaman?
Él manda, él ejerce,
Él controla, él da las órdenes...
Él nos da el alcohol, las drogas, la música,
Las mujeres, los hombres, el libido,
Los condones... él nos da todo.
Somos vagabundos, subterráneos, borrachos,
Somos Kerouac y Bukowski,
Somos Ginsberg y Miller,
Somos Rimbaud y Wilde
Somos lo que leemos
Somos lo que bebemos
Somos las drogas
y el sexo que tenemos,
Somos placer...
Somos Ginsberg y Miller,
Somos Rimbaud y Wilde
Somos lo que leemos
Somos lo que bebemos
Somos las drogas
y el sexo que tenemos,
Somos placer...
Soy lo que quiera y fumo de
Esa espiral mágica y psicodélica
Que expulsa y revienta mi cabeza de humo,
Que me deja sentado y bruto,
Viendo mundos más allá de este mundo,
Imaginando escenas de una película que no existe,
Riendo por reír...
Riendo porque si, porque así son mis noches.
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